C-Buggy

Presentado en primicia mundial en el Salón del Automóvil de Madrid 2006, el C-Buggy explora una nueva vía en el mundo de los vehículos compactos para el ocio. Este concept-car representa la visión de Citroën de un pequeño vehículo todo camino dotado de una fuerte personalidad, original, dinámico, moderno y respetuoso con el medio ambiente.

El C-Buggy cuenta con una arquitectura abierta hacia el exterior. La ausencia de techo y de parabrisas crea una sensación de libertad y contacto con el entorno, sin poner ninguna traba en el campo de visión. Además, en lugar de puertas, cuenta con grandes aberturas en los flancos, que dan un nuevo espacio visual a los pasajeros y permiten la integración en la carrocería de los estribos, lo que facilita el acceso al interior.Equipa un volante con mandos centrales fijos y el cuadro de a bordo, gráficamente muy moderno, agrupa las informaciones esenciales para la conducción. Además, incorpora un equipo de sonido digital portátil.

La carrocería del C-Buggy es de metal en bruto, mientras que el interior es minimalista, cuidado y funcional, con un puesto de conducción amarillo y cuero granulado sobre el cuadro de instrumentos, los interiores de las puertas y los asientos. El acabado exterior de la carrocería ha supuesto un importante trabajo de investigación, para que la metalización pueda evolucionar con el tiempo, jugando con la oxidación del metal.

Agilidad y potencia en todos los terrenos

Diseñado sobre un chasis modular de 4 ruedas motrices permanentes y equipado con un diferencial trasero de deslizamiento limitado, el C-Buggy combina agilidad y potencia. Con un motor de gasolina 1.6 litros, que desarrolla 155 CV, montado sobre ruedas de 17 pulgadas, este modelo se mueve por todos los terrenos sin dificultad.

Su bajo peso, 850 kg en vacío, le permite obtener el máximo de la potencia transmitida por el motor a las cuatro ruedas.

El C-Buggy también destaca por su equipamiento de seguridad. Cuenta con cinturones de seguridad de tipo arnés, airbags, arcos de seguridad que protegen a cada uno de los ocupantes y una carrocería robusta y envolvente.Además, para reforzar su carácter aventurero, incorpora una brújula en la parte superior del cuadro de instrumentos, delante del pasajero.